jueves, 13 de mayo de 2010

La Fe y lo que nos aparta de este gran don (supersticiones)

CIC 172 Desde siglos, a través de muchas lenguas, culturas, pueblos y naciones, la Iglesia no cesa de confesar su única fe, recibida de un solo Señor, transmitida por un solo bautismo, enraizada en la convicción de que todos los hombres no tienen más que un solo Dios y Padre (cf. Ef 4,4-6). S. Ireneo de Lyon, testigo de esta fe.
San Agustín decía que la ignorancia salva, Santa teresa de Ávila dice la Ignorancia ya no salva, porque ahora es muy fácil conocer que viene de Dios y que nos aparta de Él.
Ciertamente aun en nuestro tiempo se deja a Dios de lado y se cree más en otras cosas y gente piensa que no es algo malo, hace unos meses platicaba con alguien acerca de poner una bandita roja en el cuerpo de los bebes, ella decía que es para protección, y yo dije que mas protección que la que nos puede dar Dios, dije también que porque no ponerle un rosario o cualquier sacramental, pero me contesto está bien usted le puede poner el rosario y yo le pongo la bandita roja, que terrible ¿No? Es lo mismo que decir tu le pones un ángel a su lado y yo le pongo una arma al otro, y podrán decir que soy exagerado, pero pensemos bien, que si tenemos a Dios que nos puede traer este amuleto porque es eso lo que es, Quien a Dios tiene nada le falte (Santa Teresa de Ávila) pensemos también cuantos miles de niños nacen a diario, ¿y les ponen amuletos a todos?, claro que no.
Las supersticiones van en contra del primer mandamiento: “No habrá para ti otros dioses delante de mí” El número 2111 del Catecismo de la Iglesia Católica nos recuerda que “la superstición es la desviación del sentimiento religioso y de las prácticas que impone. Puede afectar también al culto que damos al verdadero Dios, por ejemplo, cuando se atribuye una importancia, de algún modo, mágica a ciertas prácticas”. La superstición es una perversión de la religión.
Aquí en áfrica hay todavía creencias más ilógicas, practicas severas, hacen cortaduras en los cuerpos de los niños, marcándolos utilizando navajas afiladas, piedras, espinas, veneno, circuncidan niños y hasta a las niñas, y esto es los extremos ciertamente, pero también lo hacen por superstición, ¿y que de bien le trae a los niños? De igual forma seguimos creyendo en cosas ilógicas, alguien decía que no tenemos fe como un grano de mostaza sino como una calabaza, pero una fe de este tamaño en cosas sin sentido, cuantos no salen de sus cazas sin leer el Horóscopo y aun dicen ser católicos, cuantos tienen herraduras en las puertas, cuantos ponen ajos y no son para ayuntar los murciélagos, hay personas que dicen no hay que creer ni dejar de creer, ¿cómo me explican esto?
Las supersticiones, no fundamentadas o asentadas de manera irracional en el ser humano, pueden estar basadas en tradiciones populares, normalmente relacionadas con el pensamiento mágico. El supersticioso cree que ciertas acciones (voluntarias o no) tales como rezos, conjuros, hechizos, maldiciones u otros rituales, pueden influir de manera trascendental en su vida.
Se consideran supersticiones entre otras a:
• la adivinación, la astrología, la cartomancia, el curanderismo , el espiritismo, el feng-shui , la geomancia, la magia, la quiromancia, el tarot, etc.

Les invito a confiar más en Dios, a poner todas sus preocupaciones y necesidades en sus manos, a rezar el santo rosario a diario, especialmente este que es el mes dedicado a La Virgen María, use sacramentales (Rosario, escapulario, medallas, Cruces) no como amuletos sino para hacerle recordar que un Dios todopoderoso lo ha creado y que no lo deja de la mano, no tenga miedo si deja de hacer esas prácticas, ese es el miedo que infunde el mal para apartarnos de lo bueno, como dije antes no hay arma más poderosa que la oración.

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